El expresidente Juan Orlando Hernández ha subido al estrado en la Corte del Distrito Sur de Nueva York en Estados Unidos, para testificar en su propio juicio, mismo que se ha desarrollado en un periodo de once días, donde se han presentado 12 testigos por parte de la fiscalía y cinco por parte de la defensa del ex mandatario.
Especialistas en la materia aseguran que el subir al estrado es un peligro ya que se puede incriminar así mismo, así lo sostiene eL exjefe de Operaciones Internacionales de la Administración para el Control de Drogas (DEA), Mike Vigil.
Y cataloga esto como un acto de deseperación por parte del expresidente y de su defensa, ya que para Vigil con los 12 testimonios en su contra es suficiente para condenar a Hernández.
