La escritora hondureña Cintia Bernárdez abogó este viernes en la III Feria Internacional del Libro Honduras 2024 (FIL HONDURAS) por un incremento en la creación y promoción de literatura que represente auténticamente a los pueblos indígenas y afrodescendientes.
“La verdad es que hay poca creación literaria que refleje las cosmovisiones de las poblaciones indígenas y afrohondureñas desde adentro. No es lo mismo la literatura indigenista que la literatura indígena”, señaló Bernárdez en una entrevista con EFE, tras participar en el conversatorio Retos y desafíos de la literatura infantil en la FIL HONDURAS.
Bernárdez subrayó que en Honduras, la mayoría de los libros relacionados con estas poblaciones son creados por autores que no forman parte de ellas, lo que a menudo lleva a que “se nos mire como objetos de estudio”. Por ello, destacó la necesidad de fomentar una literatura dirigida hacia estas comunidades, especialmente porque “tenemos los índices más bajos de lectura e incluso de educación”.
La escritora también enfatizó la importancia de reformar el currículo escolar para incluir más literatura indígena y afrodescendiente, y llevar estas iniciativas directamente a las comunidades. Según Bernárdez, la actividad literaria en el país suele centrarse en las principales ciudades como Tegucigalpa, San Pedro Sula, y Santa Rosa de Copán, mientras que zonas como La Mosquitia, hogar de cuatro grupos étnicos, permanecen desatendidas.
“Es crucial que lleguemos a la Mosquitia y trabajemos con nuestros hermanos misquitos para que se interesen en estos procesos. Será muy difícil generar más literatura indígena y afrohondureña si no fomentamos la escritura en esas comunidades”, recalcó.
Nativa de Santa Rosa de Aguán, en el departamento de Colón, Bernárdez es licenciada en Pedagogía con orientación en Administración y Planeamiento de la Educación, y autora de nueve libros, que incluyen obras sobre el aprendizaje de la lengua materna, así como cuentos y poesía.
Además, Bernárdez considera que Honduras necesita avanzar en la literatura infantil y desarrollar procesos formativos para el público en general, con el fin de incentivar la creación literaria. Subrayó la importancia de apoyar a editoriales emergentes y escritores locales para incrementar la disponibilidad de libros y fomentar la lectura en el país.
“Debemos fomentar la lectura no solo desde las escuelas, sino también desde las familias y los hogares, creando espacios donde las personas puedan acceder a libros y fortalecer estos procesos”, subrayó la autora del libro infantil Kakumen, una colección de cuentos en lengua garífuna que narra historias de héroes y leyendas de su etnia, mayoritariamente ubicada en la costa caribeña de Honduras.
Bernárdez también destacó la necesidad de ofrecer a los niños “un espacio con una gran variedad de libros infantiles, creados por autores nacionales, para que puedan conocer no solo Caperucita Roja, sino también otras historias con raíces en su propia cultura”.
En el segundo día de la FIL HONDURAS, se presentaron al menos doce libros de autores hondureños y latinoamericanos, además de un Concierto familiar a mover los pies a cargo del dúo español Ajayu, talleres literarios, un recital de poesía y la ponencia Roque Dalton en México, entre otras actividades.